Agua

Agua

¡Entre todos se puede!

Para asumir nuestras responsabilidades en el tema del agua, lo primero, como en todos los asuntos públicos, es que te informes, participes, monitorees a las autoridades, a las empresas y a tus representantes, que estudies las medidas que se toman sobre el tema o bien propongas aquellas que pueden ayudarnos a cuidar nuestro recurso. 


Ademas de eso, hay muchos cambios pequeños pero fundamentales que generaran una nueva cultura del agua en tu vida y te ayudaran a cuidar ese bien escaso y vital.
Cuidar el agua es ser civilizad@ en el siglo XXI. 
El 70% de la superficie de la Tierra está cubierta por agua. Es el único planeta del sistema solar donde el agua puede permanecer en estado sólido, líquido o gaseoso en la superficie. Por eso creemos que existe en cantidad suficiente para garantizar la vida de todas las especies que habitan en este planeta, y que nunca se va a acabar.
Sin embargo, la mayor parte es agua salada que se encuentra en los océanos y mares, y no es apta para el consumo. El 3% del volumen total es dulce, pero de esta última, solo un 1% está en estado líquido; el 2% restante se encuentra en estado sólido, en plataformas de hielo en las latitudes próximas a los polos.

A la luz de estos porcentajes, es fácil darse cuenta que la cantidad de agua apta para el consumo es muy poca para cubrir las demandas de una población que aumenta en forma exponencial. Si a este aumento de la demanda le sumamos los problemas que ocasiona el cambio climático y los efectos del calentamiento global que han elevado las temperaturas de las aguas, y la contaminación provocada por diferentes factores, nos encontramos frente a un serio problema de escasez de este recurso vital.

El agua es el componente básico para la vida. De ella depende la supervivencia de casi todos los seres vivos que habitamos este planeta. Sin agua no habría vida. En realidad, no habría planeta, ya que el 70% está formado por agua.